Como en una casa sostenible, en ninguna parte. ¿Te gustaría vivir con más confort, ahorrar dinero en climatización y disfrutar de una mejor salud? Estos son solo algunos de los motivos por los que querrás que tu hogar sea sostenible. ¿Quieres que te dé más? Sigue leyendo.
Es más confortable
Una vivienda sostenible están construida con materiales naturales. Además, al ser microporosos –permiten el intercambio del aire interior a través de los poros en muros y techos– ayudan a regular los niveles de humedad interior de los edificios e incrementan la sensación de bienestar.
Permite ahorrar
Una mayor capacidad de aislamiento térmico y factores como la ventilación cruzada o la correcta orientación solar permiten un ahorro considerable en climatización. También es importante la reducción en el consumo de agua, gracias al aprovechamiento de aguas pluviales (utilización de aljibes o depósitos para su almacenamiento) y recuperación de aguas grises.
Es más saludable
Los materiales de construcción naturales son sanos. Son una alternativa saludable al síndrome del edificio enfermo que sufren muchas oficinas y hogares. Al no presentar tóxicos, reducen las alergias, los problemas respiratorios, inmunológicos, malestar o sensación de cansancio.
Reduce la huella de carbono
Se emplea materiales abundantes en la zona, por lo que el menor requerimiento de transporte reduce la huella de carbono. Así, por ejemplo, en zona de cultivos de cereales abunda la paja y será el material preferido; en zonas abundantes en arcilla se utilizará el barro o el adobe (barro mezclado con paja); y en zonas boscosas la madera puede ser la mejor opción.
Ayuda a cumplir las nuevas normas de construcción
El Documento Básico de Ahorro de la Energía, del Código Técnico de Edificación establece que, antes del 31 de diciembre de 2020, todos los nuevos edificios deberán tener un “consumo de energía casi nulo”. Una vivienda sostenible presenta un menor consumo energético y es bastante frecuente la instalación de paneles fotovoltaicos, pequeños aerogeneradores o sistemas de energía solar térmica.
Recupera saberes tradicionales
La industrialización y la emigración a las ciudades ha provocado la práctica desaparición de oficios tradicionales en muchas pequeñas poblaciones. La vivienda sostenible es una buena oportunidad para recuperar esos oficios y crear empleo.
Fomenta los lazos sociales
Construir una vivienda sostenible es una buena oportunidad para que un grupo de familiares, amigos o vecinos vivan una bonita experiencia que, además, ayuda a crear nuevos vínculos y reforzar los existentes. Si te interesa la vida en común, existen múltiples iniciativas como las ecoaldeas o el co-housing.