En la actualidad, la sostenibilidad se ha convertido en un aspecto fundamental en la planificación y construcción de edificios. La preocupación por el medio ambiente y la búsqueda de soluciones que reduzcan el impacto negativo de las construcciones en el entorno ha llevado al surgimiento de edificios totalmente sostenibles. 
Un edificio sostenible debe tener en cuenta diferentes aspectos para lograr un equilibrio entre la eficiencia energética, la utilización de materiales sostenibles y la reducción de residuos. Estos son algunos de los elementos clave que debe tener un edificio para ser totalmente sostenible:
1. Eficiencia energética: Un edificio sostenible debe ser capaz de maximizar la eficiencia energética. Esto implica el uso de sistemas de iluminación y climatización eficientes, así como la incorporación de paneles solares, sistemas de captación de agua de lluvia y sistemas de gestión inteligente de energía.
2. Utilización de materiales sostenibles: Es fundamental utilizar materiales de construcción que sean renovables, reciclables y de bajo impacto ambiental. Esto implica optar por materiales como la madera certificada, el acero reciclado, el vidrio de bajo consumo energético y los aislantes ecológicos.
3. Gestión eficiente del agua: Un edificio sostenible debe contar con sistemas de recolección y reutilización de agua de lluvia, así como con sistemas de bajo consumo de agua, como inodoros de doble descarga y grifos con sensores. También es importante garantizar la correcta gestión de las aguas residuales.
4. Diseño bioclimático: El diseño del edificio debe aprovechar al máximo las condiciones climáticas de su ubicación. Esto implica la orientación adecuada del edificio para aprovechar la luz solar y la ventilación natural, así como el uso de elementos de sombreado y la incorporación de jardines verticales y azoteas verdes.
5. Calidad del aire interior: Un edificio sostenible debe garantizar una buena calidad del aire interior. Esto se logra mediante la instalación de sistemas de ventilación eficientes, la utilización de materiales de construcción no tóxicos y la implementación de medidas para reducir la contaminación del aire interior, como la prohibición del tabaco y la utilización de productos de limpieza ecológicos.
6. Reducción de residuos: Durante la construcción y operación del edificio, es importante minimizar la generación de residuos. Esto se puede lograr mediante la implementación de estrategias de reciclaje y reutilización, así como el uso de materiales prefabricados y la planificación eficiente de los procesos de construcción.
Elementos esenciales de un edificio sostenible
Hay varios elementos esenciales que deben estar presentes en un edificio sostenible para garantizar su eficiencia energética, su impacto ambiental reducido y su confort para los ocupantes. Algunos de estos elementos clave son:
1. Aislamiento térmico: Un buen aislamiento térmico es fundamental para minimizar las pérdidas de calor en invierno y las ganancias de calor en verano. Esto se logra mediante el uso de materiales aislantes de alta calidad en las paredes, techos y suelos del edificio.
2. Ventilación eficiente: La ventilación adecuada es esencial para mantener una buena calidad del aire interior y garantizar el confort de los ocupantes. Un sistema de ventilación eficiente debe permitir la entrada de aire fresco y la expulsión del aire viciado, minimizando al mismo tiempo las pérdidas de energía.
3. Iluminación natural: La iluminación natural no solo reduce la necesidad de iluminación artificial, sino que también mejora el bienestar de los ocupantes. Los edificios sostenibles deben contar con ventanas y tragaluces estratégicamente ubicados para aprovechar al máximo la luz natural.
4. Eficiencia energética: Los edificios sostenibles deben incorporar sistemas y equipos eficientes en el uso de energía, como iluminación LED, electrodomésticos de bajo consumo y sistemas de calefacción y refrigeración eficientes. Además, se debe considerar el uso de energías renovables, como paneles solares, para reducir la dependencia de fuentes de energía no renovables.
5. Gestión del agua: La gestión eficiente del agua es otra característica clave de los edificios sostenibles. Esto implica la instalación de sistemas de recolección y reutilización de agua de lluvia, así como la implementación de dispositivos de ahorro de agua, como grifos y duchas de bajo flujo.
6. Materiales sostenibles: Los materiales utilizados en la construcción de un edificio sostenible deben ser duraderos, de bajo impacto ambiental y preferiblemente reciclables. Además, se deben priorizar materiales locales para reducir la huella de carbono asociada al transporte.
7. Reciclaje y gestión de residuos: Los edificios sostenibles deben contar con sistemas de reciclaje y gestión adecuados para minimizar la generación de residuos y promover la reutilización de materiales. Esto implica la instalación de contenedores de reciclaje, la separación de residuos en origen y la implementación de políticas de reducción de residuos.
Estos son solo algunos de los elementos esenciales que deben considerarse al diseñar y construir un edificio sostenible. La combinación de estos elementos contribuirá a la creación de un entorno construido más eficiente, respetuoso con el medio ambiente y saludable para los ocupantes.
Requisitos para un edificio 100% sostenible
1. Eficiencia energética: Un edificio sostenible debe ser altamente eficiente en el uso de energía. Esto implica utilizar sistemas de iluminación y climatización eficientes, así como incorporar tecnologías renovables como paneles solares o turbinas eólicas para generar energía.
2. Uso de materiales sostenibles: Es fundamental utilizar materiales de construcción que sean respetuosos con el medio ambiente. Esto incluye la utilización de materiales reciclados, de origen local y con baja huella de carbono. Además, se debe priorizar el uso de materiales no tóxicos y de larga duración.
3. Gestión del agua: Un edificio sostenible debe implementar sistemas de gestión del agua que permitan reducir su consumo y optimizar su uso. Esto puede incluir la instalación de sistemas de recogida y reutilización de aguas pluviales, así como la utilización de dispositivos eficientes como inodoros y grifos de bajo consumo.
4. Diseño bioclimático: El diseño del edificio debe aprovechar al máximo las condiciones climáticas de su entorno. Esto implica orientar el edificio de manera adecuada para aprovechar la luz natural y el calor solar en invierno, y reducir la incidencia directa del sol en verano. Asimismo, se deben utilizar materiales y sistemas constructivos que permitan una adecuada ventilación natural.
5. Gestión de residuos: Es esencial implementar sistemas de gestión de residuos eficientes en el edificio. Esto incluye la separación y reciclaje de los diferentes tipos de residuos generados, así como la reducción en la generación de residuos mediante el uso de materiales duraderos y la implementación de prácticas de consumo responsable.
6. Confort interior: Un edificio sostenible debe proporcionar un ambiente interior saludable y confortable para sus usuarios. Esto implica la utilización de sistemas de climatización adecuados, la regulación de la temperatura y humedad, así como una adecuada iluminación natural y artificial que no genere deslumbramientos ni sombras molestas.
7. Certificación sostenible: Para garantizar la sostenibilidad de un edificio, es recomendable obtener una certificación reconocida que avale su cumplimiento con los estándares de sostenibilidad establecidos. Algunas de las certificaciones más reconocidas son LEED, BREEAM o WELL, las cuales evalúan diferentes aspectos relacionados con la sostenibilidad del edificio.
1. Eficiencia energética: Un edificio sostenible debe estar diseñado y construido de manera que minimice el consumo de energía. Esto implica utilizar materiales y técnicas de construcción que mejoren el aislamiento térmico, permitiendo reducir la necesidad de calefacción o refrigeración artificial. Además, se deben incorporar sistemas de iluminación eficientes y utilizar energías renovables, como la solar o la eólica, para cubrir las necesidades energéticas del edificio.
2. Gestión del agua: Otro aspecto fundamental para la sostenibilidad de un edificio es la gestión eficiente del agua. Esto implica el uso de tecnologías y sistemas que permitan la reducción del consumo de agua potable, como la instalación de dispositivos de ahorro en grifos y duchas. Además, se deben implementar sistemas de recolección y reutilización de agua de lluvia para el riego de áreas verdes o el uso en sistemas sanitarios. También es importante contar con sistemas de tratamiento de aguas residuales para evitar la contaminación de los recursos hídricos cercanos.