Abora es una compañía española fundada en 2017 el Dr. Alejandro del Amo, experto internacional en energía renovable. En la actualidad, Abora fabrica paneles solares que proporcionan agua caliente y electricidad en una instalación híbrida que se rentabiliza en poco tiempo, lo que le permite ser la tecnología solar más rentable del mercado. Esto es posible gracias a su tecnología aHTech®, que cuenta con una serie de capas aislantes cuyo diseño y disposición consiguen reducir al mínimo las pérdidas térmicas del panel y maximizar la producción eléctrica.
Abora consiguió el primer premio en Horizon 2020, el mayor programa de Investigación e Innovación de la Unión Europea, en el que competían alrededor de 15.000 empresas europeas de ámbito tecnológico, y tiene el honor de haber sido la única empresa del sector solar que lo ha conseguido.
La tecnología híbrida supone producir, en el mismo módulo solar, tanto electricidad como agua caliente. Esta idea, afirma Antón San Sebastián
Ingeniero de Ventas de Abora, «nace del hecho de que en los paneles fotovoltaicos que existen actualmente en el mercado, la eficiencia es aproximadamente de tan solo un 20%. El resto se pierde, tanto por reflexión como por pérdidas de calor».
Alejandro del Amo, CEO de Abora, realizó su tesis doctoral sobre esta tecnología. En la Universidad, realizó diferentes pruebas. Un primer prototipo (PVT-1) contaba con aislamiento posterior; pudo darse cuenta de que, cuando llevaba el circuito hidráulico a 60º C, temperatura del agua caliente sanitaria, el rendimiento caía un 5%, pues las pérdidas se iban por la parte frontal. Para solucionar este problema, ideó un aislamiento transparente para la parte frontal de los paneles, creando así el primer panel híbrido con protección frontal (PVT-2).
La tecnología aHTech® reduce las pérdidas de calor. Han conseguido pasar de un rendimiento del 56% en el primer módulo (un 40% en la térmica y un 16% en la fotovoltaica), a una eficiencia del 89% (un 19% en la fotovoltaica y un 70% en el agua caliente sanitaria), lo que supone casi el máximo teórico que puede permitir esta tecnología híbrida.
El panel sería como un sándwich con varias capas: u aislamiento de lana de roca, un recuperador con tubos de cobre, la de las propias células fotovoltaicas, y un tratamiento específico para soportar las altas temperaturas que alcanza.
Las diferentes tecnologías híbridas han ido evolucionando, hasta el modelo actual en el que se han realizado mejoras hasta conseguir ese 70% de eficiencia en laboratorio.
Según Antón San Sebastián, «en cuanto al rendimiento económico, nuestros paneles son más eficientes que un panel térmico o que un fotovoltaico. Nuestro valor diferencial es que el payback de nuestros paneles (retorno de la inversión) está entre 4 y 7 años. Comparado con una fotovoltaica, conseguimos mayores ahorros».
«Actualmente tenemos dos modelos en el mercado. El primero, el Abora aH72SK, con una potencia eléctrica de 350 vatios pico, casi 2 metros cuadrados de superficie, con una producción térmica del 70% y una producción fotovoltaica en torno al 19%. El segundo, el Abora H60SK, permite optimizar el espacio dado que tiene dimensiones un poco más reducidas», añade Antón San Sebastián, Ingeniero de Ventas de Abora.
¿Son asequibles vuestros paneles híbridos?
Nuestra idea como empresa es vender el panel solar más rentable del mundo. Para ello, tenemos que buscar que sea el más eficiente del mercado, lo que ya hemos conseguido, y por otra parte debemos conseguir una escalabilidad de precios: cuanto más podamos vender, mejores precios podremos dar y más rentables serán los paneles.
¿Cuáles son vuestros mejores clientes?
Los sectores en los que mejor estamos objetivizados serían todo tipo de edificaciones con alta demanda de electricidad y agua caliente, con una superficie de captación limitada. Esto incluye hoteles, hospitales, residencias, polideportivos, campings, etc. También funciona muy bien en multiviviendas, sobre todo en aquellas con producción centralizada, y en todo tipo de industrias, sobre todo en aquellas que cuentan con varios turnos y un consumo elevado de agua caliente en las duchas de los empleados, por ejemplo.
¿Puedes hablarnos de algunas de vuestras instalaciones?
Algunos casos de éxito son: una piscina en Sant Cugat (Barcelona), con tan solo 4 años de amortización de la instalación; las residencias Vitalia (con trece instalaciones en funcionamiento y otras cuatro a realizar a lo largo de 2021 y 2022); los hoteles de la cadena Iberostar de Tenerife y Chiclana de la Frontera (esta última es la instalación más grande que tenemos en España, con 300 paneles híbridos), un tercero próximo a su realización y otros dos en proyecto.
Otro ejemplo es un lavadero de coches cisterna, que se limpian con agua muy caliente; con un ciclo de trabajo muy amplio, el rendimiento con nuestra tecnología es muy alto, con una amortización temprana.
¿Qué es lo que más valoran vuestros clientes?
Los reducidos costes que se pagan por la electricidad y el combustible. Teniendo en cuenta el precio actual de la energía eléctrica y del gas, suponen un importante ahorro.
Ahora mismo, por Real Decreto, hay que cubrir un 60-70% del ACS y una generación eléctrica, lo que queda cubierto con nuestros paneles. El Real Decreto 244/2019 supone una simplificación administrativa, un apoyo al autoconsumo colectivo y una compensación de la energía excedentaria.
¿Qué puedes decirnos del mantenimiento de vuestras instalaciones?
Además de fabricar los paneles hídricos, contamos con una amplia experiencia como empresa instaladora. Aprovechando dicha experiencia, fabricamos componentes hidráulicos de calidad que están diseñados específicamente para este uso, por lo que evitamos fugas o roturas por fatiga (dilatación y contracción).
También fabricamos las estructuras, que vienen precortadas para adecuarse a la inclinación de la cubierta, ya sea plana o inclinada. La instalación resulta muy cómoda y rápida.
Actualmente, la aerotermia es una tecnología en alza y la instalación de nuestros paneles supone una menor demanda de electricidad. Precalentamos el agua que va a ir a la aerotermia, eso hace que el consumo eléctrico sea menor e, incluso, el exceso de electricidad va a parar al autoconsumo de la vivienda. Esto supone un importante ahorro tanto en la factura de gas como en la de electricidad.
Por otra parte, también diseñamos proyectos ad hoc como la acumulación estacional, que emplea un depósito subterráneo; o la trigeneración solar, en el que con una máquina de absorción producimos frío, calor y electricidad.
Ofrecemos también una herramienta de monitorizado. Actualmente, estamos desarrollando un nuevo sistema en el que, de un vistazo, podemos consultar la energía térmica generada, la energía eléctrica, los ahorros económicos, los ahorros de emisiones de CO2, temperaturas de entrada, de salida, presiones… que permiten al cliente conocer al instante lo que está produciendo y lo que está ahorrando, y al instalador saber que todo funciona correctamente, y al personal de mantenimiento, con esos datos, llevar a cabo un mantenimiento preventivo. Y a nosotros, certificar que lo que prometemos es lo que se está generando realmente.
Damos una garantía de diez años, siempre que cumplan los parámetros de haber sido la instalación realizada correctamente, una protección de la misma con un disipador de calor, una monitorización para comprobar el funcionamiento. La vida útil es de 25 años, según las pruebas que hemos realizado mediante un laboratorio externo, aunque dada la calidad de los materiales y de la fabricación, creemos que será mayor.