Abr 4 | bioconstrucción, Noticias Destacadas, Protagonistas | Ecologia Cotidiana | 1973 Visitas | con Comentarios desactivados en La Ruta Natural
La Ruta Natural es una tienda y exposición de bioconstrucción (y mucho más) de la histórica y monumental ciudad de Chinchón, situada al sureste de Madrid. Jesús es la persona que atiende este pequeño lugar pero lleno de encanto y soluciones para un hogar sano. Charlando con él, descubres no solo al profesional sino también a una persona que demuestra pasión por la vida y la preservación de la naturaleza. En el exterior de la tienda encontramos un pequeño bosque de alimentos que se mantiene por sí mismo sin necesidad de riego. Jesús me va describiendo los frutos de esta huerta silvestre: acelgas, habas, alcachofas, aromáticas, e incluso pequeños frutales como un membrillo y un manzano… se trata –afirma– de crear suelo, ya que «la naturaleza obra por sí misma, las plantas colaboran entre sí y cada una tiene su función». Dice haberse criado en el pueblo y demuestra un perfecto conocimiento del entorno de Chinchón (de hecho, es guía de naturaleza y puede recomendar rutas por la zona).
La Ruta Natural, más que una tienda es un camino hacia estar más en armonía con la naturaleza en tu propio hogar y en el lugar de trabajo. La filosofía es duración, calidad y salud. El nombre lo elegí porque es un palíndromo (se lee igual de izquierda a derecha que de derecha a izquierda).
La tienda se alimenta por energía solar. Se rehabilitó con criterios de bioconstrucción: se eliminaron los barnices tóxicos, se aplicaron aceites naturales y las letras del cartel las elaboramos a partir de los recortes de los aislamientos de corcho natural que hemos empleado en rehabilitaciones de casas, otra de nuestras actividades. El interior está realizado con tierra de la zona y tiene diferentes acabados.
Por otra parte, la web toma el nombre del perihelio, que es el momento en el que el sol está más cerca de la tierra. Además, también nos dedicamos a la energía solar y nuestra tienda está desconectada de la red eléctrica, pues se alimenta por las placas solares fotovoltaicas del exterior, aprovechando que la fachada está orientada hacia el sur.
Durante la pandemia, obligados a permanecer en casa, muchas personas han sido más conscientes de los problemas que presentan muchas viviendas: las condensaciones internas que se generan, cómo se oye al vecino, la falta de un mobiliario adecuado para el teletrabajo (no puedes trabajar todo el día en una silla de cocina)… se han dado cuenta de que, después de la alimentación sana, es fundamental tener una casa sana.
Muchas personas que nos visitan vienen sobre todo a informarse. Nosotros damos esa información de forma gratuita, con la intención de que la gente despierte su conciencia. Lo que hacemos en la tienda son elementos que vamos sembrando para que en un futuro nos pueda dar de comer. Además, es un showroom de lo que hacemos. Nuestro verdadero motor es la bioconstrucción: aislamientos térmicos, estufas de inercia, instalaciones solares y reformas.
Sí, contamos con varios modelos, la mayoría de ellos portátiles y plegables. Su funcionamiento es muy sencillo: la forma parabólica concentra los rayos de sol en el centro y, en poco tiempo, se alcanzan 250 ºC en un día soleado. Además, gracias a un visor que muestra dónde se concentra el máximo de energía solar, se puede regular la potencia que queremos.
Si queremos cocinar con fuego, podemos hacerlo con una olla dutch oven (horno holandés) Petromax, de hierro fundido, que podemos colocar sobre el fuego o entre las brasas, o incluso en la cocina solar. Tienen una gran inercia térmica, por lo que conservan el calor durante mucho tiempo. Además, son altamente resistentes, duraderas y versátiles. La tapa incluso puede servirnos de sartén para cocinar sobre ella, por lo que es muy buena solución como cocina portátil.
En la tienda tenemos un muestrario de acabados, como un mortero de cáñamo y cal, que nos permite realizar formas orgánicas tanto en interior como en exterior. Una de las reformas que hemos realizado es la de los baños del parador de Chinchón, donde hemos utilizado tierra con pigmentos naturales y un acabado especial para lugares húmedos. Gracias a nuestra experiencia, conseguimos acabados muy bellos y más económicos que si hubiésemos empleado, por ejemplo, tadelak.
Además, tenemos lasures naturales para la madera, disolventes ecológicos y pinturas naturales. También ladrillo de cáñamo, corcho, lana de cáñamo…
tratamos también con yeso coloreado de la zona, que podemos revocar directamente sobre él. Para aislamientos, nos gusta trabajar con manta de cáñamo, que presenta diferentes grosores y por sus características se adapta mejor a zonas angostas al ser más flexible que otros materiales aislantes como el corcho.
La cama es un sistema especial, totalmente flexible, completamente ventilado y 100% reciclable, que ofrece una garantía de 10 años. No lleva ninguna parte metálica, la suspensión es mediante piezas de latex 100% natural, reemplazable y compostable. El secreto de este sistema es la ventilación natural, que es capaz de disipar el medio litro de sudor que desechamos cuando dormimos e impide la proliferación de bacterias. Va recubierto con una funda lavable y una funda de lana virgen. Gracias a la estructura del somier, te estira y desbloquea las tensiones de la espalda: a lo largo, se adapta a tu cuerpo; a lo ancho, te levanta y te abre el pecho, mejorando la circulación sanguínea, la respiración y la regeneración de órganos, que es el objetivo del descanso.
Jesús me invita a probar la cama y doy fe de que la sensación es completamente diferente a otros colchones que he probado. Efectivamente, se adapta perfectamente a mi cuerpo tumbado tanto boca arriba como de lado, y la sensación de bienestar es inmediata.
De hecho, es uno de los artículos más vendidos. Nuestras almohadas están rellenas de lana virgen, que por sus características apelmaza muy poco y es excelente para disipar las humedades, principalmente las del cuello. Su forma es específica para el cuello y permite modular la cantidad de relleno en función de las necesidades de cada persona.
Efectivamente. La diferencia entre una tienda física como esta y una tienda online, es la posibilidad que tienes de probar la cama, las sillas, o de percibir las texturas de los materiales que vendemos. Además, siempre surgen preguntas que podemos atender en el instante que surgen. Es otra filosofía diferente, porque aunque puedas devolver algo que compras online, a saber si luego lo vas a usar aunque no lo devuelvas. En Internet, la compra es más impulsiva, mientras que en una tienda física la compra es más meditada, ya que tienes toda la información y asesoría de quien te atiende en persona.
Comederos para pájaros.
No son meras sillas ergonómicas, sino que estamos hablando de sillas activas, ya que al estar sentados sobre ellas estamos haciendo ejercicio. Nosotros somos distribuidores de la marca Aeris, que con su concepto de «oficina activa» nos ayudan a fortalecer la espalda y nos permiten una posición óptima. Contamos con modelos para trabajar sentado o de pie, que tiene un rango dinámico muy amplio y nos ayuda a proteger los discos intervertebrales gracias a su sistema hidráulico. También un modelo 3D que se adapta a cada espalda gracias a su respaldo dinámico y, además, permite ajustarse al peso de cada persona y los movimientos laterales. Otro modelo es una mecedora que nos permite sentarnos hacia adelante, hacia atrás o de lado. Además, tenemos una alfombra especial para la gente que trabaja de pie, que imita al suelo del bosque gracias a las diferentes densidades y durezas con las que cuenta, lo que permite estimular la planta del pie, descargar las tensiones de la espalda y favorecer el descanso.
En realidad, son soluciones de tratamiento para el agua, desde filtros hasta sistemas completos como el Acala-Quell, que puede potabilizar incluso agua de ríos o charcos. Funciona por gravedad, haciendo que el agua pase por una serie de filtros. El primero, cerámico, es de solo 0,2 micras, lo que impide el paso de las bacterias. Luego pasa por otro filtro con carbón, arcilla, plata y sal del Himalaya. Finalmente, unas piedras de minerales mineralizan el agua.
PARA MÁS INFORMACIÓN:
Leer más »Mar 19 | Noticias Destacadas, Protagonistas | Ecologia Cotidiana | 12448 Visitas | con Comentarios desactivados en Domos geodésicos de madera
Richard Buckminster Fuller, diseñador, arquitecto e inventor estadounidense, desarrolló el diseño y cálculo de las cúpulas geodésicas –cuya primera patente se emitió en 1954– como una solución que se ha utilizado para muchas construcciones (invernaderos, pabellón de exposición, y viviendas ecológicas). También conocidas como domos geodésicos, son una excelente alternativa constructiva para levantar una casa de una forma más rápida y económica. En este post nos vamos a centrar en los domos geodésicos de madera, gracias a la colaboración de Tokamadera, que ofrece uno de los sistemas prefabricados para casas de madera más competitivos del mercado.
La cúpula geodésica es una estructura perfecta del universo: las formas geométricas expresadas en ella provienen del octaedro y del icosaedro de Platón.
El octaedro es como dos pirámides invertidas unidas en su base. Simboliza la perfección de la materia por el espíritu.
A su vez, el icosaedro representa la semilla de la vida.
El primer paso consiste en crear una plataforma de un diámetro igual al de la cúpula y de la frecuencia a utilizar donde se va a aposentar. A partir de aquí pasamos a la construcción de la cúpula.
La madera es uno de los elementos que nos brinda la naturaleza y que embellece. La utilizada para las tarimas que van a la intemperie, soporta las inclemencias del tiempo: sol, lluvias, nieve, granizo, calor intenso o fríos secos, etc.
Economía. Una cúpula es la forma geométrica que encierra la mayor cantidad de volumen mediante la menor área de superficie, lo que supone un coste inicial menor.
Mayor ahorro de material de construcción para encerrar vida útil o área de trabajo.
Aplicaciones. La cúpula geodésica, por sus características, proporciona amplitud de espacio y comodidad, ventilación, iluminación, notable reducción en el tiempo de construcción, así como menor coste con respecto a los materiales tradicionales.
Los beneficios de estar en una cúpula geodésica se expresan en cualquiera que sea su uso, siendo una construcción ideal como:
– Vivienda geodésica de una planta.
– Vivienda geodésica de domos pareados.
– Sala para actividades de meditación o yoga.
– Auditorio para reuniones, cursos o eventos.
– Almacén de materiales.
– Sala para terapias alternativas.
– Sala infantil para juegos.
– Expositor para ferias.
– Cubierta para piscinas.
– Cabaña rural.
Control de la temperatura externa e interna. Son uno de los refugios más seguros en las zonas con climas más extremos y violentos del planeta, puesto que la exposición al frío en invierno, y al calor en verano, es menor.
Una cúpula, al ser esférica, tiene menos área de recubrimiento por unidad de volumen interno, y por ello la ganancia o pérdida de temperatura es menor.
La forma interior hace que se produzcan flujos de aire caliente o frío, que pueden utilizarse para controlar la temperatura interna, estabilizarla y uniformarla, eliminando así los posibles puntos fríos.
La frecuencia geodésica de un domo es el grado de complejidad en la estructura y la curvatura de las cúpulas. Si aumentamos la frecuencia, se obtiene más resistencia estructural, una curvatura más suave pero con altura variable.
Todos estos datos están calculados en los kit según tamaños, lo que permite escoger el kit según cada necesidad, siendo posible incluso construir un segundo nivel.
Cuanto mayor es la frecuencia, más perfecta es la curvatura de la estructura.
Tokamadera es una empresa creada en diciembre del 2012. Comprometida con el Medio Ambiente, su lema es fomentar el equilibrio del ecosistema, promoviendo la bioconstrucción. Busca fomentar el conocimiento del medio natural, impulsando la conservación de la naturaleza para regenerar terrenos castigados con incendios y la sobre explotación mediante la reforestación con Paulownia.
Tokamadera pone en valor el uso de la madera para la construcción de domos geodésicos con productos no contaminantes. También distribuye y construye casas prefabricadas en madera, con certificado de eficiencia energética, que se diseñan a medida, a petición del cliente, por parte de su equipo técnico.
Sus domos más vendidos son:
Domo vivienda de 6 metros de diámetro.
Sala estar dormitorio 25,5 m2.
30 m2 construidos.
Precio desde 19.550 € (no incluye impuestos, mobiliario ni honorarios de proyecto).
Domo vivienda de 8 metros de diámetro con altillo:
Cúpula de 8 metros.
Salón – cocina – dormitorio de 44 m2 con cama en altillo – Sofá cama.
52,30 m2 construidos.
Desde 23.750 €.
Domo vivienda pareados con pasillo de 8 + 6 metros de diámetro cada cúpula:
Domo Vivienda.
Cúpula de 8 metros : salón – comedor de 48 m2
Cúpula de 6 metros : 1 dormitorio de 22 m2 y 1 aseo 6 m2
Pasillo: 6 m2
87 m2 construidos
Desde 48.750 €.
Para más información:
Leer más »Ene 31 | Noticias Destacadas | Ecologia Cotidiana | 1819 Visitas | con Comentarios desactivados en Supermercados colaborativos
Los supermercados colaborativos son un interesante modelo para adquirir, a un precio más asequible, productos sostenibles (en su mayoría de productores locales, en una relación comercial justa) a cambio de una participación que puede suponer una cuota anual pero también aportar horas de trabajo voluntario en el establecimiento. En este post voy a presentarte cuatro de ellos que ya funcionan, o están próximos a hacerlo, inspirados por el ya veterano Park Slope Food Coop de Brooklyn o por el parisino La Louve.
Desde este supermercado cooperativo –constituido como tal en 2020, aunque inició su andadura en 2014 con el economato situado en la calle Giralda de Getafe (Madrid)– nos contesta Emilio Lázaro.
Este tipo de proyectos apuesta por productos que se hayan producido en las mejores condiciones medioambientales posibles: el 95% de los productos que vendemos tienen certificado ecológico. Las frutas y verduras no tienen pesticidas ni fertilizantes prohibidos por la agricultura ecológica; se han hecho respetando los procesos naturales, con la mínima huella ecológica y consumo de agua.
Los lácteos también son elaborados desde el máximo respeto a las condiciones de los animales, sin un uso sistemático de antibióticos en estos, ni productos que pudieran acelerar el crecimiento.
Por otro lado, intentamos que sean lo más próximos que sea posible para reducir el consumo de combustible durante el transporte. En la Comunidad de Madrid lo tenemos complicado, porque la agricultura ecológica no es que sea un fuerte. La fruta tiene que venir de la costa mediterránea, de Lérida o de Andalucía. Y la verdura suele venir de Aranjuez, Segovia o Ávila, dependiendo de la temporada. Y los productos más lejanos (por ejemplo chocolates o café) son de comercio justo.
También apostamos por el granel (fruta, verdura, semillas, pasta, e incluso productos de limpieza para el hogar y el mínimo envase posible. Con ese ahorro de envases evitamos contaminar. Además, la gente viene con sus propias bolsas y envases (nuestras balanzas permiten hacer la TARA del envase).
Nosotros tenemos, con algunos de ellos, una relación de muchos años, desde que éramos un economato. Es una relación de confianza que nos permite saber cómo se han producido esos productos, pues hemos ido a conocerles. Además, les invitamos a venir para presentar cualquier producto nuevo. Esto nos permite ponerles cara. Gracias a esa relación de confianza, nunca hemos tenido problema alguno con nuestros proveedores. No discutimos los precios: no estamos para regatear o ponerlos en cuestión y realizamos los pagos lo antes posible, ya que entendemos que esto es una rueda que tiene que funcionar.
Que sea un producto de calidad y ecológico. Si hay gente que no tiene sello ecológico, sí existe el sello de la confianza, de saber que son productos o ingredientes ecológicos. Lo que buscamos es que sea gente concienciada, independientemente de que tengan el sello o no, aunque la gran mayoría sí lo tiene porque es un beneficio para ellos.
También apoyamos proyectos de gente que está empezando, que quiere apostar por el producto ecológico. Los productores y proveedores saben a quiénes están vendiendo, ya que en Biolibere somos una comunidad muy concienciada con el consumo responsable y la salud.
Las personas socias de este tipo de supermercados encuentran una diferencia radical desde el primer momento. En primer lugar, son consumidores que buscan un consumo responsable, que apuestan por el medio ambiente. En segundo lugar, las personas socias tienen que venir a colaborar un par de horas al mes, por lo que viven las dificultades de tener que hacer un pedido, recepcionar, colocar, limpieza, etiquetado, etc. Esto permite que la gente valore el trabajo que supone hacer llegar este tipo de productos a los clientes. Por la pandemia, ahora las actividades –algunas realizadas por los propios socio– están más restringidas, pero hacemos por ejemplo talleres de divulgación o charlas de consumo responsable. Aquí no utilizamos publicidad. Lo que intentamos es que se compre menos pero mejor.
En nuestro supermercado cooperativo, decidimos abrir al público no socio, aunque el precio en ese caso no es igual. El precio para socios tiene un 7% de descuento en todas las compras; a cambio, estos tienen que hacer 2 horas de trabajo mensual (por cada unidad de consumo) y una aportación de 30 euros como cuota anual. Esto les permite además participar de forma democrática dentro de la vida asociativa. Mucha gente que comenzó comprando como no socia termina dando el salto, no solo por el beneficio económico, sino por su voluntad de participar en el proyecto.
Estas iniciativas no son fáciles. Es necesario tener muchas ganas y echar muchas horas de trabajo, realizar gestiones complejas… si no hay una parte militante, este tipo de proyectos no salen. La gente también va viendo los problemas de intolerancias alimentarias, enfermedades no bien detectadas en el sistema sanitario y que tienen relación con la alimentación. Yo creo que esta forma de comercializar ha venido para quedarse. Pero insisto en que no es fácil y no va a ser un boom. El proyecto de referencia mundial es el de Nueva York, que cuenta con 15.000 socios y lleva trabajando desde los años 70. Desde entonces hasta ahora ha habido muchos intentos y no todos han tenido éxito. Incluso algunas tiendas ecológicas han tenido que echar el cierre debido a la crisis económica, agudizada por la pandemia. Yo creo que una vez que superemos esto, tiene futuro y van a aumentar los proyectos en este sentido.
Este supermercado ha abierto sus puertas recientemente en el madrileño barrio de Tetuán, en el número 57 de la Avenida de Asturias. Con un local de 800 m² (Madrid), requiere a sus cooperativistas participar con 3 horas de tu tiempo cada 4 semanas en los turnos del supermercado y una única aportación de 100€ al capital social. Responde María Nájera, socia cooperativista de La Osa.
Apostamos por productos con menor proporción de tóxicos en su producción y por tanto menos perjudiciales para el medioambiente. Además los productos de cercanía están muy presentes en nuestras estanterías. Al ser dueños de nuestro propio supermercado toda la comunidad se va transmitiendo valores y prácticas sostenibles como la reutilización de bolsas o compartir transporte privado para hacer la compra.
Profesionalidad, compromiso, estabilidad y comunicación.
Surtido variado, profesionalidad, calidad en los productos y precios asequibles. Nuestros criterios de selección están basados en la calidad y en su impacto social positivo (pequeños productores y elaboradores, que fomenten proyectos integradores).
En apariencia es un supermercado al uso con una amplia oferta de alimentos y productos para la higiene personal y la limpieza del hogar, pero en el fondo nada tiene que ver. El modelo de autogestión reduce los costes operativos y permite ofrecer precios más asequibles. Y es que, a la hora de elegir los productos, se valoran seis criterios: calidad, impacto medioambiental, cercanía, producción ética, precio justo y que responda a la demanda de los socios.
LA OSA es un modelo de supermercado en el que solo pueden comprar los cooperativistas que han aportado 100 euros al capital social y que se comprometen a desempeñar voluntariamente durante 3 horas, cada 4 semanas, tareas como: recepción de pedidos, atención en caja, reposición, limpieza, administración… Junto a ellos existen dos coordinadores y fundadores así como un equipo profesional de cuatro personas; los seis perciben un sueldo y se encargan de la gestión del supermercado y de las compras. Los beneficios se revierten con el objetivo de hacer más accesibles los productos.
LA OSA tiene su origen en 2decologico, que hasta la apertura del supermercado en la Avenida de Asturias ocupó una pequeña tienda en la calle Noviciado. El entusiasmo y convencimiento de otro modelo por parte de sus miembros les llevó a concebir un supermercado como el que ya existe. Nos inspiraron dos movimientos internacionales: Park Slope Food Coop (Brooklyn) y especialmente La Louve, en París y cuya experiencia y asesoramiento han sido clave.
Food Coop BCN, Supermercado Cooperativo y Participativo de Barcelona, es una cooperativa integral, de consumo y servicio promovida por la Associació per l’Impuls dels Supermercats Cooperatius i el Mercat Social. Para poder abrir sus puertas próximamente, busca el impulso de 500 socias que quieran participar en su funcionamiento.
En FoodCoopBCN tenemos en consideración el impacto ambiental de nuestro establecimiento y de nuestra estrategia de abastecimiento. Se intentará reducir la creación de CO2 priorizando el consumo de productos de proximidad, entendiendo como proximidad un radio de 250 km del establecimiento. Además, se consumirá energía procedente de fuente 100% renovables, probablemente con SomEnergia. También se procederá a la diferenciación de los residuos generados y se intentará reducir los residuos orgánicos con 2 estrategias fundamentales: el compostaje y la reducción del desperdicio en tienda. Sobre esta última, estamos haciendo un estudio subvencionado por el ayuntamiento de Barcelona para poder maximizar la reducción. Porque la reducción del impacto ambiental es posible solo abarcando diferentes estrategias contemporáneamente.
Nuestra idea es de poder tener unas relaciones a largo plazo con los productores, relaciones en la cuales podamos generar confianza entre nosotros y ser transparentes sobre la manera de producir y nuestra manera de funcionar.
Tenemos unos criterios de selección de proveedores y de selección de producto que se basan sobre la proximidad, la temporalidad de los productos, pero también sobre el proceso de producción que tiene que ser sostenible y también adaptado al territorio. Uno de nuestros objetivos es la dinamización de la economía local entonces nuestro interés va dirigido hacia estas realidades que dinamizan y generan una mejoría para su entorno, como por ejemplo los yogures de La Fageda.
Nuestro supermercado cooperativo es una iniciativa sin ánimo de lucro, esta es una diferencia fundamental respeto a todos los otros supermercados que puedas encontrar. Esto no significa que sea una ONG, se tienen que tener resultados positivos, pero todo lo que se genera se reinvierte en el supermercado al fin de bajar los márgenes comerciales, por ejemplo, o también para formar nuevos cooperativistas o para apoyar iniciativas que el colectivo considera. Otra grande diferencia es el modelo de abastecimiento que promueve un supermercado cooperativo y la transparencia en su política comercial como en su oferta de productos. Un supermercado cooperativo es un espacio donde puedes consumir con conciencia, confiando que la oferta de productos está hecha siguiendo unos criterios que han escogido los mismos socios.
El beneficio es el de participar en una comunidad activa y que comparte unos valores y un objetivo, el de hacer más accesible la comida de calidad y de proximidad a más gente posible. Además, seremos flexibles a las necesidades de las socias, pero siempre manteniendo bien claro el principio de igualdad.
Creo que el modelo de supermercado cooperativo y participativo tiene capacidad de replicación en Europa, porque es evidente que es necesario promover iniciativas que intenten cambiar el modelo de distribución global, que no es sostenible ni nivel ambiental ni a nivel social. Esta no es la opinión de unos militantes ya, sino que representa un modelo de empoderamiento ciudadano como lo demuestran las decenas de iniciativas que espontáneamente nacen en todo el territorio.
El supermercado cooperativo de Madrid Centro (SuperCoop) cuenta con unas 800 personas socias. Actualmente funciona online y espera abrir pronto sus puertas en el Mercado de San Fernando, en el barrio de Lavapiés. Su fin es hacer accesible a todo el mundo una alimentación sana y de cercanía. Su objetivo es ofrecer precios atractivos para los/las cooperativistas, más bajos que en otras tiendas y supermercados convencionales y/o agroecológicos.
En primer lugar, apoyamos la producción agroecológica, que no utiliza fertilizantes sintéticos ni fitosanitarios que afectan no solo al entorno sino a la salud de trabajadoras y consumidoras. Este tipo de producción se basa en el cultivo con semillas naturales y no modificadas genéticamente. También fomentamos la ganadería extensiva, que enriquece y conserva el entorno rural.
En segundo lugar, se priorizan los productos de cercanía para acortar la cadena de distribución y favorecer la relación directa con productores y productoras, disminuyendo así también las emisiones de CO2 debidas al transporte.
Asimismo, se reduce la generación de residuos y el desperdicio de alimentos en toda la cadena de producción, distribución y consumo. También promocionamos una gestión energética eficiente del supermercado.
Otra característica es la reducción, en la medida de lo posible, del uso del plástico en el empaquetado. A cambio, se fomenta la utilización de envoltorios compostables y otras alternativas a los derivados del petróleo. También se da prioridad a la venta de productos a granel para evitar embalajes innecesarios.
La relación es acogedora, de cercanía. En algunos casos le invitamos a que se una con otros productores para poder dar respuesta a nuestras necesidades. Es el caso de UHAM (Unión de Huertas Agroecológicas de Madrid), una cooperativa de varios agricultores que nos sirven las verduras, quienes se unieron para poder dar servicio a nuestro supermercado.
Por nuestra parte, valoramos y apoyamos sus proyectos y buscamos la mayor aproximación posible (por ejemplo, visitando el proyecto).
Sí. Los criterios que seguimos son los siguientes:
Ambientales: tenemos en cuenta que su producción sea ecológica y respetuosa con el medio ambiente, en el sentido que hemos explicado antes, es decir, que no utilicen fertilizantes sintéticos ni fitosanitarios, que la ganadería sea extensiva, que se utilicen abonos orgánicos o compostaje, reducción de residuos en la cadena de producción y reducción del plástico en el empaquetado, entre otras.
Salud: consideramos que es importante poner en valor el producto fresco ecológico y de temporada y desincentivamos la compra de productos procesados poco saludables por exceso de aditivos, coadyuvantes, conservantes, sodio o azúcares. Ponemos también atención a los productos con transgénicos, aceite de palma, etcétera.
Sociales y económicos: evitamos trabajar con intermediarios y corporaciones que desarrollen prácticas abusivas e injustas para con los/las productores. Ponemos especial cuidado en que ofrezcan unas condiciones justas a sus trabajadores y, en el caso de las cooperativas de Comercio Justo, ponemos el foco en los productos procedentes de países del sur global. Tenemos en cuenta también proyectos que fomenten el desarrollo de Sistemas Alimentarios Sostenibles, esto es, vinculados con el territorio, con los que se apoye el desarrollo de las regiones productoras (rurales), la economía circular, y las conexiones entre campo y ciudad.
Transparencia: intentamos promover los canales cortos de comercialización también porque se hacen más fáciles las relaciones de confianza y/o el seguimiento. Valoramos las buenas prácticas, y tenemos en cuenta la trazabilidad de los productos y su huella ecológica.
La principal diferencia es que, como personas socias, somos a la vez dueñas y consumidoras del supermercado. Nuestro objetivo no es el lucro capitalista, sino ofrecer productos de calidad al menor precio posible. Esto se puede conseguir porque el sistema de trabajo consiste en que todas las personas socias aporten 3 horas de su tiempo cada cuatro semanas para realizar las tareas propias del supermercado. Solo alrededor de una cuarta parte del trabajo será profesionalizado, lo que nos permitirá reducir costes y disminuir así el precio de los productos. Además, este sistema permite llevar a cabo otro de nuestros objetivos: generar relaciones sociales y hacer comunidad, algo muy lejos de la realidad de un supermercado convencional.
Otra diferencia significativa es que SuperCoop tiene en cuenta el tejido social de donde está ubicado, es decir, Lavapiés, convirtiéndose en un eslabón más de trabajo conjunto y red de apoyo. Actualmente, contamos con una cesta 0, que tiene un coste de 5 euros, cuyos ingresos van destinados a la compra de comida, productos de higiene y material escolar para el Banco de Alimentos del Barrio, quien los reparte entre las personas y/o familias con carencia de ingresos económicos o en situación de exclusión social.
Actualmente nuestro supermercado está funcionando como tienda online, que solo es para personas socias. Una vez que se abra físicamente será distinto. Como estamos ubicadas en el Mercado de San Fernando, que es suelo municipal, el supermercado debe abrirse al público general.
No obstante, el precio será distinto para una persona socia que para una no socia, tanto por el compromiso con el proyecto como por el trabajo que invierte una socia y no una persona que no lo sea.
Un apunte importante que hay que hacer en este sentido es que el hecho de que el mercado sea municipal no implica que SuperCoop no pague por la cesión del local, cosa que sí hace.
Sí, van surgiendo cada vez más. Nosotras partimos del modelo de The Park Slope Food Coop (Nueva York) y de la Cooperative La Louve (París). En España, hay uno en Navarra y otros en proyecto en Barcelona y Manresa. En Madrid ya están en funcionamiento La Osa, Biolíbere (Getafe) y el nuestro.
Creemos y esperamos que sí, ya que es un compromiso con nuestro planeta y nuestro entorno. Es un sistema de consumo, producción y reproducción diferente, no enmarcado en el beneficio, que apoya a los proyectos locales y reproduce relaciones sociales y cercanas. En definitiva, creemos que cooperando se vive mejor.
Leer más »Dic 28 | Noticias Destacadas | Ecologia Cotidiana | 2173 Visitas | con Comentarios desactivados en Cohousing ecológico Entrepatios
Madrid ha estrenado con Entrepatios el primer cohousing ecológico de la ciudad. Premio Europeo de Vivienda Colaborativa 2019, el edificio está certificado CO2 nulo por Ecómetro, cuenta con un diseño Passivhaus y tiene en la madera su principal material de construcción. Además, posee instalación fotovoltaica propia, captación y aprovechamiento de aguas pluviales, está preparado para una gestión integral de sus aguas grises y cuenta con zonas comunes multiusos. Nace un nuevo modelo de vivienda alternativa social y sostenible que prima la habitabilidad, confort, salubridad y sostenibilidad de los hogares.
Es un concepto traído de la economía. En estudio sAtt, creemos que aparte del beneficio económico tenemos que tener en cuenta otros dos tipos de impacto: el ambiental y el social. Valorar, cuantificar, medir cuánto de nuestra acción (en este caso como constructores) impactamos en la sociedad donde insertamos nuestros proyectos. Hacemos un análisis del ciclo de vida de los materiales, desde su extracción, transporte, uso en la obra y mantenimiento, para estimar su impacto y analizar cómo podemos minimizarlos y tomar decisiones que nos permitan reducirlo al máximo. En este sentido, hemos elegido la madera porque es un reservorio de C02 secuestrado en los árboles (procedentes de bosques gestionados de forma sostenible y certificada) y retenido en la madera que utilizamos como material de construcción, mientras dure el edificio. También buscamos materiales más cercanos, que tengan menos huella de carbono, por estar más cercanos que otros al lugar de la obra.
Cuando hablamos de madera, lo primero que a uno le viene a la cabeza es el cuento de los Tres Cerditos, que no es tan segura como el ladrillo. A nivel de construcción, estructural y de resistencia, es tan buena como el hormigón. Pero ahora mismo, en muchos sitios, es el material de moda. Nosotros empleamos el sistema de madera «cross laminated» (paneles laminados pegados en sentido perpendicular), que le proporciona un comportamiento previsible y una gran resistencia ante incendios, como explican en este vídeo de FSC España sobre uso de madera en construcción.
CO2 nulo es un certificado que emite la Asociación Ecómetro. Acredita que un edificio no tiene emisiones de CO2 en su uso y que ha minimizado y compensado sus emisiones durante la fase de construcción. En el caso de Entrepatios, el edificio va a compensar el C02 emitido durante la obra (1.270 Tn) a través de tres proyectos mediante Climatetrade: uno de apoyo a energías renovables en Namibia, otro de recuperación de biodiversidad en Kenia y un tercero de reforestación en España.
Por otra parte, el edificio no va a emitir C02 una vez construido, ya que toda la demanda energética se cubre con electricidad, una parte de ella procedente de la propia instalación fotovoltaica del tejado y otra del suministro a través de la comercializadora renovable La Corriente.
El edificio está diseñado teniendo en cuenta criterios Passivhaus. Son espacios prácticamente herméticos, que evitan pérdidas de calor, con un sistema de ventilación mecánica cruzada, de doble flujo. Este sistema extrae el aire viciado del interior de las viviendas y lo expulsa a la calle; e introduce aire limpio de la calle, gracias a unos filtros, al tiempo que evita la desclimatización por pérdida de calor o frío.
La carpintería exterior es de triple vidrio, con interior de madera y exterior de aluminio. Y la fachada principal, que está orientada al sur, deja pasar el sol en los meses fríos; y en verano, cuenta con persianas alicantinas, creando una zona de umbría en la corrala que evita que el calor penetre en las casas.
El derecho de uso supone que la propietaria es la cooperativa. Esto evita la especulación con las viviendas, ya que el derecho es de uso y no de propiedad. En el caso de Entrepatios, se formó un grupo promotor que sacó adelante el proyecto a través de una cooperativa que compró el suelo. Cada vivienda, en función de los metros cuadrados, paga una cuota mensual por el disfrute de la vivienda.
El derecho de uso se puede transmitir y es heredable. Cuando alguien entra a formar parte de la cooperativa, paga una cantidad que será devuelta en caso de salida.
Por un lado, tenemos un sistema de aprovechamiento de aguas pluviales (captación y aprovechamiento del agua de lluvia para riego). Además, el edificio está preparado, y cuenta con un depósito para tal uso, para en el futuro aprovechar las aguas grises de las viviendas para su reutilización en el inodoro. Pero en este momento la normativa aún no lo permite. Es algo que tarde o temprano llegará.
Este es un tema que hemos hablado mucho durante la pandemia: la relación que tenemos con nuestros vecinos. Precisamente la parte social del triple balance tiene que ver con generar comunidades más resilientes, ya sea en una situación como la que hemos vivido o incluso en el día a día. Antes pedir la sal a un vecino era lo más normal. Ahora, es algo muy raro. En Entrepatios, de lo que se trata no es de vivir en una comuna, sino de fomentar los lazos entre las personas gracias a los espacios compartidos. Asi, en la planta superior se ha creado una cocina para poder comer juntos si se desea. Está por ver también si se crea un pequeño huerto en la azotea para producir alimentos propios. Tendría lugar, del mismo modo, la posibilidad de compartir los cuidados de niños pequeños o de personas mayores.
Nuestro estudio de arquitectura, a través de la promotora Distrito Natural, ha empezado a comercializar la promoción Talco. Es un modelo más rápido y flexible que Entrepatios, del que tenemos el suelo y el proyecto diseñado. A falta de la licencia de obra, estamos empezando a realizar reservas, y ya tenemos unas cuantas personas interesadas. Es una promoción de venta libre pero con todos los cualidades ecológicas: estructura de madera certificada FSC, producción fotovoltaica en el tejado, reciclaje de aguas pluviales, patio, soportales, lavandería y parking/taller de bicis; además de la parte colaborativa: terraza en la azotea de casi 150 m2 y dos locales cuyos usos decidirá la comunidad que se cree.
Esto ha sido posible gracias a un crowdlending (micropréstamos) en el que cualquier particular podía convertirse en un inversor de impacto social y medioambiental. Hay gente que apuesta por otro tipo de hacer las cosas y, gracias a ellos, en apenas cuatro meses conseguimos el dinero para comprar el solar y poner en marcha esta promoción.
Promotora: Cooperativa Entrepatios.
Gestora: Lógica ‘Eco.
Arquitecto técnico: Técnica Eco.
Constructora: GEOH.
Estructura de madera: Madergia.
Nov 28 | Noticias Destacadas | Ecologia Cotidiana | 1286 Visitas | con Comentarios desactivados en Ecolagunas
Si escuchas la palabra «depuradora», probablemente venga a tu cabeza la imagen de una instalación gris y maloliente. ¿Y si te digo que puede ser un humedal lleno de vegetación y sin mosquitos? Seguro que quieres saber cómo puede hacerse posible. Así que sigue leyendo… hoy traigo un post muy interesante sobre un sistema de depuración de aguas residuales que permite ahorrar costes de explotación y mantenimiento, con un impacto ambiental muy bajo. Nos lo explica Luis Felipe Fernández Fernández, Director Gerente en Ecolagunas Sistemas de Depuración sostenible, en esta entrevista.
La obligación de mantener las aguas depuradas depende de los ayuntamientos, en el caso de contar con menos de 50.000 habitantes. Y por encima de esa cifra, del organismo de cuenca [hidrográfica]. Esa obligación legal de depurar las aguas supone un problema para los ayuntamientos que cuentan con pocos medios, por lo que en algunos casos se han transferido las competencias a las diputaciones, que a su vez las han derivado a organismos público-privados que son los que gestionan el ciclo integral del agua, que termina gestionando una gran empresa.
Los llamados sistemas intensivos realizan el tratamiento en muy poco espacio y precisan mucha cantidad de energía, que toma de la industria energética, para esa labor. Por su parte, los sistemas extensivos ocupan más espacio pero consumen muy poca energía, que procede básicamente del sol.
Los sistemas intensivos son más sencillos y tienen un menor coste de mantenimiento y explotación. Esto se vuelve casi crítico en pequeñas poblaciones, donde los recursos son muy limitados.
Depuradora para el tratamiento de los vertidos de aguas residuales industriales de la quesería ecológica Arqueixal
En Ecolagunas, hemos tomado ejemplo de una empresa de Inglaterra que lleva un tiempo implantando allí estos sistemas, a partir de una patente americana, que introduce aire en el humedal para reducir la actividad microbiana. Aunque se requiere un pequeño consumo energético, se consigue una mejora de la eficacia del sistema en una menor cantidad de espacio que los sistemas desarrollados hasta el momento. Ese menor requerimiento de espacio convierte este sistema en mucho más atractivo, ya que puede funcionar con sólo 1,2 m2 por habitante equivalente, frente a los 4 ó 5 m2 requeridos para los sistemas sin utilización de aireación.
Además, al reducirse el volumen de construcción, se abaratan los costes y se permite una depuración de aguas más exigente, ya que se pueden rebajar parámetros que no se dan en modelos sin sistemas de aireación. Frente a la ingeniería que podríamos llamar “gris”, que requiere grandes infraestructuras y tiene mayores costes de explotación y mantenimiento, nosotros ofrecemos un sistema mucho más económico.
Ese mercado se abrió para la industria, sobre todo para la agroalimentaria (como por ejemplo queserías, bodegas, destilerías, plantas de envasado y tratamiento de vegetales y frutas), aunque también para la minería o el tratamiento de purines en explotaciones ganaderas.
Centro de actividades al aire libre “Raymond Priestly” en Torver, Coniston Water, Cumbria, UK.
La contaminación por nitratos y fosfatos en aguas causa la eutrofización de grandes masas de agua: lagos, lagunas, ríos. Un problema muy grave lo vemos en el Mar Menor, donde la solución no va a ser –desde mi punto de vista– ni rápida ni barata.
Muchas veces, los casos más llamativos son los de los purines de la ganadería (sobre todo de explotaciones porcinas). Pero también hay una parte muy importante de contaminación de aguas por los abonos químicos, que aportan grandes cantidades de nitrógeno y fósforo. Todos estos vertidos también pueden ser tratados con humedales.
Estamos intentando modificar el paradigma de lo que es una depuradora: una instalación que se construye lejos de las viviendas por los olores, la estética… Así, hemos realizado una depuradora para un municipio de la provincia de Ourense que va a ser también un centro de interpretación del ciclo del agua integrado en un espacio natural, con diferentes ofertas de ocio. La depuradora recibirá visitas y ofrecerá información sobre el funcionamiento del ciclo del agua y el papel específico de los humedales en el mismo. Además, este tipo de depuradoras basadas en humedales favorecen también la biodiversidad.
Humedales con aireación forzada FBA para tratamiento de aguas residuales urbanas con eliminación de Nitrógeno y Fósforo en la etapa secundaria. Planta piloto en el Centro Experimental de Tratamiento de Aguas Residuales – CENTA, Carrión de los Céspedes- Sevilla.
Nosotros trabajamos para ayuntamientos que nos han encargado una especie de auditoría de la situación de los distintos puntos de vertido para que les propongamos la alternativa más viable para cada caso. Es una asesoría que solemos realizar sin coste en esos casos.
Ecolagunas es una consultora. Pero, debido a la escasa experiencia que existe en cuanto a construcción de estas infraestructuras, nos hemos visto obligados a invadir la actividad constructiva para llevar, bajo nuestra mano, la construcción de algunas plantas.
Nuestra actividad abarca, en primer lugar, estudiar qué alternativa es la más adecuada. Si el cliente las considera viables, desarrollamos el proyecto y procedemos a la ejecución y el mantenimiento. Pero lo que nos gusta más es trabajar como aliado tecnológico de otras consultoras o estudios de arquitectura que desean realizar este tipo de proyectos con estos sistemas, de tal modo que aportamos el know how.
Ejemplo de una instalación para vertido 0 en una vivienda unifamiliar.
En este momento, estamos desarrollando un proyecto en Quito (Ecuador) de construcción de un humedal que recoge las aguas pluviales para su reutilización como aguas grises (para uso en inodoros y lavadoras) y de riego. Este mismo esquema se puede utilizar en bloques de viviendas o edificios de servicios. La única diferencia es la dimensión. Para una vivienda unifamiliar, si bien no es un método demasiado rentable, las necesidades de espacio estarían entre 12 y 20 m2.
Ejemplo de una instalación para vertido 0 en un edificio de viviendas.
Tenemos también un proyecto en Madrid para una comunidad de propietarios, donde el humedal va en la azotea, en una especie de cubierta verde cuya primera fase de tratamiento está en el garaje. Desde ahí, se bombea el agua a la cubierta verde y se redistribuye al resto del edificio, por gravedad, mediante un doble circuito.
Esto está avanzando, pero la legislación no está preparada aún. Por ley, cuando un arquitecto realiza un proyecto urbanístico para un promotor, es obligatorio poner un punto de vertido a la red pública; de lo contrario, ese trabajo no sería legal. Por lo tanto, se da la paradoja que, aunque decidimos realizar vertido 0, es obligatorio pagar las tasas. Esto no está alineado con el nuevo paradigma de sostenibilidad. La legislación debería abrir esta puerta para beneficiar el desarrollo de este tipo de edificios autosuficientes en cuanto a la necesidad de agua.
PARA MÁS INFORMACIÓN:
Leer más »Oct 15 | Noticias Destacadas, Protagonistas | Ecologia Cotidiana | 1515 Visitas | con Comentarios desactivados en Entrevista a Esturirafi
Esturirafi es el nombre del blog que comenzaron hace seis años dos hermanas gallegas, Rut y Nahir, quienes han tenido la amabilidad de responder a mis preguntas en este post. Además de haber publicado más de 500 entradas, Esturirafi es desde hace un par de años también una ecotienda que nos permite comprar online productos sin plástico que no supongan un problema para el medio ambiente una vez acabada su vida útil.
Exacto, todo empezó con un blog en el año 2014. Un hobbie en el que poníamos en práctica nuestros estudios y todo lo que nos apasionaba: ecología, fotografía, informática, diseño… En ningún momento nos imaginamos que llegaríamos tan lejos. Fue algo que surgió poco a poco. Empezamos colaborando con marcas sostenibles, después sacamos unas bolsas de algodón con mensajes que vendíamos a través de la plataforma etsy. La idea de crear una tienda online de productos zero waste estuvo rondando en nuestras cabezas dos años, hasta que por fin la abrimos en junio de 2018.
He tenido la suerte de vivir en varios países: Reino Unido, Francia, Portugal, Estados Unidos… Me sorprendió lo fácil que era en Francia en el año 2015 acceder a productos ecológicos: en los mercados, supermercados, pequeñas tiendas… Tengo la sensación que cuanto más al norte, mayor es la conciencia de cuidado del medio ambiente. Portugal lo noté un paso por detrás de España, aunque en los últimos años ha habido un cambio grande y cada vez están más concienciados. Estados Unidos fue un shock, es el “paraíso” del plástico de un solo uso, la cultura del usar y tirar, de la comida rápida… Creo que es un ejemplo de todo lo que no se debe hacer. Aunque es un país de contrastes, en el que si quieres evitar este estilo de vida puedes, aunque sale más caro.
Creo que hay que buscar el lado positivo de todo esto. Por ejemplo, esta crisis ha hecho que el tráfico aéreo a nivel mundial disminuya muchísimo, algo que el calentamiento global agradecerá. Por otro lado, muchas personas se han dado cuenta de lo que es necesario y lo que no, haciendo que cambien sus hábitos de consumo: más compra local, comprar lo necesario, moda sostenible, etc. Estos pequeños cambios de consumo y en nuestro modo de vida repercutirán en el futuro del planeta, aunque como siempre el poder de cambio a gran escala lo tienen otros.
Me encanta la fotografía, aunque la practico poco últimamente, llevo haciendo fotos desde muy pequeña. Muchas de las fotografías del blog y de los productos de la tienda las hago yo en mi pequeño “estudio” casero 🙂
Cuando empezamos a escribir en el blog no teníamos un perfil de lector definido. Escribíamos sobre lo que nos gustaba, compartíamos descubrimientos, tutoriales, recetas… Lo mismo en las redes sociales. Con el paso de los meses nos dimos cuenta que nuestro contenido conectaba mejor con las mujeres, por lo que decidimos hablar en femenino y priorizar temas que interesan más a las mujeres como la menstruación o la moda sostenible. No creemos que haya más mujeres con conciencia ecológica que hombres. Tal vez sea cuestión del canal que utilizamos: blog y redes sociales.
En el año 2015 conocimos por primera vez el término Zero Waste, a través del blog y redes sociales de Bea Johnson y Lauren Singer… Empezamos a ser más conscientes de los residuos que generábamos. Reciclar no era ni es suficiente, teníamos que reducir nuestra bolsa de la basura. Fuimos aplicando pequeños cambios que compartíamos por las redes sociales: copa menstrual, discos desmaquillantes, botella reutilizable, etc… Surgió mucho interés y nuestras seguidoras tenían dificultades para encontrar estos productos cero residuos. Nosotras mismas muchas veces tuvimos que recurrir a tiendas de fuera de España para conseguirlos. Esta fue nuestra principal motivación, crear un espacio, en este caso una tienda online, en la que reunir todos los productos que utilizamos y recomendamos para una vida sin plásticos de un solo uso y con menos residuos. Con el objetivo final de llegar a ser Zero Waste.
Para formar parte de nuestra tienda online zero waste, un producto debe cumplir varios requisitos:
Damos prioridad a los productos artesanales o de pequeños productores. También apostamos por el producto Km0, cuanto más cerca mejor. La mayoría de nuestros productos son españoles: cremas de Teruel, esponjas de luffa de Caldas de Reis, jabones de Ribadavia, champús de Puebla de Sanabria, etc.
Antes de incorporar un producto lo probamos personalmente durante varias semanas. Es la única forma de garantizar que funciona y cumple todos los requisitos. No pretendemos ser una gran tienda con mil referencias. Queremos que Esturirafi sea garantía de calidad.
Sí, creemos que es posible vivir sin plástico de un solo uso. Nosotras no lo hemos conseguido, pero seguimos intentándolo y luchando día a día y hemos reducido muchísimo, aunque cada semana se cuela alguno… Siempre hablamos de los plásticos de un solo uso: botellas, envases, film para envolver alimentos, productos de higiene… Hay otros muchos plásticos a los que no podemos renunciar: el que está en nuestro ordenador, coche, teléfono… Tampoco evitamos los plásticos relacionados con la salud: medicamentos, tratamientos…
Es verdad que si retrocedemos 100 años la basura no existía: los envases eran retornables y lo que se generaba eran desechos orgánicos que volvían a la tierra o se utilizaban para alimentar a los animales. Reducir nuestra basura es posible y muy necesario. Tal vez no consigas un residuo cero, pero con que hayas reducido la mitad ya es un gran paso. No se trata de hacerlo perfecto, se trata de hacer algo.
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Leer más »Ago 23 | Vida eco | Ecologia Cotidiana | 1230 Visitas | con Comentarios desactivados en Errores y aciertos en mi compromiso sostenible
Errare humanum est. Sirva esta publicación para reconocer algunos errores (y también aciertos) que cometo al intentar cumplir mi compromiso cotidiano con la sostenibilidad. Sé que es un post atípico, pero soy consciente de que no es fácil ser coherente, y creo que reconocer públicamente aquello que podría mejorar no solo me sirve a mí sino al vez también a tí, si es que has sentido alguna vez esta incoherencia.
Confieso que admitir esto me causa un conflicto interior, pues años atrás no concebía en personas de mi entorno que no pudiesen prescindir del automóvil en algunos de sus desplazamientos.
En mi defensa, tengo que decir que procuro que sea mi última opción, y que el transporte público es mi medio preferido para moverme libremente, sobre todo cuando lo hago por la ciudad de Madrid. Por cierto, mi coche tiene 14 años y un montón de kilómetros, pero te aseguro que pasa todas las revisiones y consume menos que la media de gente que conozco.
Alimentar una familia en estos tiempos tiene un precio. Si a eso sumo las prisas, la comodidad y la falta de pequeño comercio en mi entorno, entre otros factores, el resultado es que termino comprando productos que podrían ser más sostenibles.
Procuro comprar toda la fruta y verdura en tienda ecológica, directamente al productor o en grupo de consumo, si bien esto último ha sido bastante complicado desde que empezó el confinamiento y la restricción de movilidad.
Esto es lo que más me duele. Ver cómo se llena la bolsa de envases de un solo uso me causa un gran malestar. Evito los productos semielaborados o elaborados. Pero, aparte de verduras y frutas, es complicado encontrar alimentos que no estén envasados en plástico. Incluso he intentado sumarme al reto #juliosinplastico, pero no he sido capaz de cumplirlo.
Al respecto, planteo una serie de preguntas, a ver si alguien me las puede contestar: ¿Por qué la mayoría de las bebidas se venden en envases de plástico o lata de aluminio? ¿Por qué es más fácil encontrar un yogur o una bebida vegetal en plástico o en pet? ¿Sería muy caro o difícil implantar un sistema de retorno?
¿A tí no te ha pasado? Por mucha conciencia que tengamos, no podemos ignorar que vivimos en un sistema capitalista y de consumo. En cuanto bajas la guardia, llegas a casa con algo que no habías pensado comprar. O lo que es peor, te lo pides cómodamente online, sin salir de ella.
Como decía en las primeras líneas, errar es humano. Caer en la cuenta de las compras compulsivas es lo importante. Darse cuenta de que nos lleva demasiado tiempo y energía comprar algo que luego guardamos sin usar; en el mejor de los casos, lo devolvemos o revendemos; en el peor, acaba en el punto limpio (quiero pensar que no tiras a la basura más que residuos orgánicos o aquello que es imposible de reciclar 😜).
Paso demasiadas horas delante del portátil y el móvil. Soy un buscador incansable de información, siempre explorando alternativas, dada mi curiosidad. Investigar nuevos temas para este blog, personas y proyectos que me inspiren y con los que aprender, me entretienen más de lo que quisiera en muchas ocasiones. Gestionar toda esa información, tomar notas, gestionarlas y organizarlas para tenerlas accesibles desde cualquier lugar y dispositivo. Comenzar a ver un vídeo que me ha llegado a través de un enlace, y continuar viéndolo más cómodamente en una pantalla más grande… y terminar visitando las «sugerencias» de YouTube o de otras redes sociales, es un tiempo que dejo de dedicar a otras tareas o descansar. Pero no es solo la «pérdida» de tiempo lo que me preocupa. Te lo cuento a continuación.
El creciente uso de Internet está suponiendo inversiones multimillonarias para responder a una elevada demanda de datos (con el vídeo como principal protagonista). Sobre este tema, te recomiendo la lectura de este post de la cooperativa de telecomunicaciones Somos Comunicación, que expone que Internet contamina… ¡y mucho!
1 Mejorar mi alimentación. Conocer el origen de la comida. Soy lo que como. Cuido mi salud y cuido a las personas que cultivan con mimo nuestros alimentos orgánicos. He reducido casi a la mínima expresión el consumo de carne, procuro que sea de producción ecológica y evito aquella que proviene de macrogranjas. Uno de mis propósitos es pasarme a la carne de pasto orgánica.
2 Practicar el minimalismo en todo lo posible. Prescindir de todas aquellas cosas que antes compraba y que hoy no necesito o no me llenan: pensar bien si tal prenda de ropa la puedo combinar y me va a gustar la temporada próxima, si ese electrodoméstico o “gadget” me va a ser útil o es fruto de un capricho.
3 Aprender a cultivar y a crear mi propio compost. Entrar en contacto con la huerta, mancharme las manos y doblar la espalda ha sido altamente reconfortante. También he elaborado una mini compostera en una de mis jardineras, donde ya he creado y utilizado el compost para mis plantas; muy a pequeña escala, pero contento con el resultado.
4 Buscar gente comprometida e implicarme en actividades medioambientales: plantaciones de arbustos y árboles; construcción e implantación de cajas nido para aves; mantenimiento de jardines vecinales; charlas de concienciación, reuniones para compartir…
5 Reducir, Reutilizar, Reciclar y, sobre todo Reflexionar. Aunque realizo una adecuada gestión de los residuos domésticos, procuro reflexionar sobre el tipo de cosas que introduzco en casa. No por mucho reciclar te vuelves más sostenible. El residuo mejor gestionado es el que no se llega a crear.
Espero que algo de lo que aquí has leído pueda servirte de ayuda. Lo he escrito desde una voluntad de servicio, pues es algo que he hablado con otras personas que estamos en situaciones similares y entiendo que no es fácil abordarlo desde la soledad. Considero que el apoyo mutuo es básico para superar esa sensación y no desesperar. Te invito a practicarlo, a que busques personas afines y participes de asociaciones, grupos de consumo o cualquier otro tipo de colectivo.
Sé que cada vez somos más las personas sensibilizadas y comprometidas, cada una desde su particular situación, en un mundo más sano y sostenible. Si deseas compartir tus motivaciones, tus aciertos y errores, tu visión o preocupaciones, estaré encantado de escucharte. Si estás suscrito, puedes responder a la dirección de email por la que recibes los boletines. O escribirme en el apartado Contacto (te dejo aquí el enlace). ¡Estaré encantado de leerte!
Leer más »Jun 22 | Noticias Destacadas | Ecologia Cotidiana | 1977 Visitas | con Comentarios desactivados en Congreso Virtual de Vivienda Colaborativa
El confinamiento obligatorio ha puesto a prueba nuestro modelo de vida, modificando nuestros hábitos y costumbres cotidianos. Vivir y convivir en viviendas que no siempre reúnen las condiciones deseadas (tamaño, orientación, aislamiento térmico y acústico, con materiales sanos no contaminantes, jardín o terraza y espacios amplios para poder encontrarnos con nuestros familiares y amigos) deja claro que necesitamos otro modelo de vivienda.
Cohabitar, Congreso Virtual de Vivienda Colaborativa se celebrará del lunes 22 al viernes 26 de junio. Reunirá, por primera vez, al mayor grupo de personas expertas en vivienda colaborativa: 34 ponentes. Es una oportunidad inmejorable para conocer las claves y aprendizajes de quienes están trabajando para construir un nuevo modelo de convivencia.
La inscripción es gratuita (permite ver las sesiones de cada día durante 24 horas). Si prefieres repasar cómodamente todas las ponencias, te recomiendo el pase premium, válido para todo el año 2020, con el que tendrás acceso ilimitado a las 34 ponencias más las ponencias extra. Además, podrás descargar recursos y acceder a contenidos extra.
Las conferencias, que se celebrarán de lunes a viernes, están disponibles durante 24 horas: de 7:00 a 7:00h, horario UTC+1 Madrid). Cada día se aborda un bloque temático:
La revolución colaborativa del habitar
Ferrán Aguiló · La Dinamo
Evolución y tendencias de las viviendas colaborativas en España
Cristina Cuesta · CohousingSpain
Propuestas para envejecer en comunidad Senior
Miguel Ángel Mira Illana · Asociación Jubilares
Cuidados y servicios asistenciales para la dependencia en cohousing
Cristina Cuesta · CohousingSpain
Referentes internacionales de vivienda cooperativa
Lorenzo Vidalfolch · UAB
AMPLIACIÓN:
Hábitos y habilidades colaborativas para una vida en común
Florencia Lauret · VivamosJuntos.com
Desarrollo del grupo y cuidado del proceso
Nacho García · Tangente
Acompañamiento en la creación del proyecto
Eugenia Boada · Matriu
Facilitación de procesos grupales
Mabel Cañada · iiface/Lakabe
Viviendo y aprendiendo de la diversidad y el conflicto
Ana Rhodes · Centro de Transformación del Conflicto Humano
Nuevas gobernanzas basadas en la Sociocracia
Mauge · Arterra
Profundizar en los cuidados
Irati Mogollón · Arquitecturas del cuidado
AMPLIACIÓN:
La experiencia de una vida en comunidad
Mandi Domingo · Cal Cases
Claves del plan financiero y fiscalidad
Hernán Córdoba · La Dinamo Fundació
Financiación ética para proyectos
Juan Garibi · Fiare
Financiación ética, social y solidaria
Guillém Fernández · Coop57
Financiación de proyectos en Europa
Mauricio O’Brien · European Crowdfunding Network
Crowdfunding para proyectos de vivienda colaborativa
Gala Pin · Goteo / CrowdCoop
Retos de financiación de proyectos en España
David Guardia · SostreCivic
Claves legales para la creación de proyectos
Iker San Román · Casa Alternativa
El modelo de cesión de uso
Santi Merino · Consejo Superior de Cooperativas de Euskadi
Hablando con la Administración Pública
Ferrán Aguiló · La Dinamo
Normativas a considerar en el Estado Español
Cristina Grau · abogada Patronato
Avances y propuestas institucionales en la CAV
Mario Yoldi, Director Vivienda · Gobierno Vasco
Impulso de proyectos en Barcelona
Javier Burón · Gerente de Viviendas de Barcelona
Procesos de diseño colaborativos para proyectos
Iñaki Alonso · sAtt Arquitectura
Arquitectura para la vivienda colaborativa
Gloria Gómez y Daniel Bergman · Equipo arquitectura proyecto Entrepatios Vallecas
Sostenibilidad y Eficiencia
Pol Masoni · LaCol
Cuidar la cultura del encuentro en el paisaje
Aida López · Unesco-UPV/EHU
Una aproximación feminista a la vivienda y su entorno para la colectivización de los cuidados
Roser Casanovas · Col·lectiu Punt 6
YOUTUBE/FACEBOOK LIVE ARIWAKE 19:00h (UTC+1 Madrid)
Jaime Moreno · Torremocha del Jarama, Madrid
YOUTUBE/FACEBOOK LIVE ARIWAKE 17:00h (UTC+1 Madrid)
Ferrán Aguiló · Sants, Barcelona
YOUTUBE/FACEBOOK LIVE ARIWAKE 19:00h (UTC+1 Madrid)
Ricardo Moriñigo · Usera, Madrid
YOUTUBE/FACEBOOK LIVE ARIWAKE 19:00h (UTC+1 Madrid)
Mandi
YOUTUBE/FACEBOOK LIVE ARIWAKE 19:00h (UTC+1 Madrid)
Pendiente de confirmar participantes
Desde el sábado 27 de junio (disponible con el pase PREMIUM)
Patricia Álvarez · Atelier 15 Madrid
Martina Dell’Unto · Atelier 15 Madrid
Helga Ring · Mietshäuser Syndikat
Gustavo González · Secretario General de FUCVAM
Web del congreso virtual Cohabitar
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