La arcilla secada al aire es un material popular utilizado en muchos proyectos de arte y manualidades. Es una opción conveniente y económica para aquellos que desean crear esculturas y otros objetos sin la necesidad de un horno para su cocción. Sin embargo, una pregunta común que surge es si la arcilla secada al aire se puede mojar. 
La respuesta es que, si bien la arcilla secada al aire es resistente al agua, no es completamente impermeable. Esto significa que, si se expone a una cantidad significativa de agua o se sumerge en ella, puede perder su forma y estructura original, volviéndose más suave y frágil.
La humedad excesiva puede hacer que la arcilla secada al aire se agriete o se desmorone, especialmente si no se ha aplicado ningún tipo de sellador o barniz para protegerla. Por lo tanto, si planeas utilizar objetos de arcilla secada al aire en exteriores o en áreas donde estarán expuestos a la humedad, es recomendable aplicar una capa de sellador para protegerlos.
Sin embargo, si solo se trata de una exposición ocasional al agua, como salpicaduras o pequeñas gotas, la arcilla secada al aire generalmente no se verá afectada de manera significativa. Aun así, es importante tener en cuenta que la exposición prolongada al agua puede dañarla.
La arcilla se puede mojar después de secarse
En primer lugar, es importante destacar que la arcilla es un material natural utilizado en diversas disciplinas como la cerámica, la escultura y la construcción. Cuando se trabaja con arcilla, es común que se moldee y se deje secar al aire para que adquiera una consistencia más firme y estable.
Sin embargo, a pesar de que la arcilla se seque y se vuelva dura al tacto, no significa que sea completamente impermeable al agua. La arcilla puede absorber humedad nuevamente si se expone a condiciones húmedas o si se sumerge en agua.
Esto se debe a que la arcilla está compuesta principalmente por partículas finas de minerales, como la caolinita, que tienen la capacidad de retener agua. Cuando la arcilla se seca, estas partículas se compactan y se adhieren entre sí, formando una estructura sólida. Sin embargo, si se expone nuevamente a la humedad, las partículas de arcilla pueden volver a absorber agua y expandirse ligeramente.
Es importante tener en cuenta que la capacidad de la arcilla para absorber agua después de secarse varía dependiendo de su composición y proceso de cocción.
Por ejemplo, la arcilla utilizada en cerámica de alta temperatura, como la porcelana, puede ser menos porosa y absorber menos agua que la arcilla utilizada en cerámica de baja temperatura, como la gres.
Cuando la arcilla se moja después de secarse, es posible que vuelva a adquirir una consistencia maleable. Esto puede ser beneficioso en algunas aplicaciones, como la reparación de piezas de cerámica o la creación de esculturas detalladas que requieren de un modelado adicional.
Sin embargo, también es importante tener precaución al mojar la arcilla después de secarse, ya que esto puede provocar cambios en su estructura y afectar su durabilidad. Por ejemplo, si la arcilla se moja y se seca repetidamente, puede debilitarse y agrietarse con el tiempo.
Tiempo de secado de arcilla al aire
El tiempo de secado de la arcilla al aire puede variar dependiendo de varios factores. Por lo general, la arcilla al aire libre puede tardar entre 24 y 48 horas en secarse por completo. Sin embargo, esta estimación puede variar según la humedad y temperatura del ambiente.
Es importante tener en cuenta que la arcilla al aire libre se seca más lentamente que la arcilla cocida en un horno. Esto se debe a que la arcilla al aire se seca mediante la evaporación del agua, mientras que la arcilla cocida en un horno se endurece a través de un proceso de cocción.
Para acelerar el tiempo de secado de la arcilla al aire, se pueden tomar algunas medidas. Por ejemplo, se puede colocar la pieza de arcilla en un lugar bien ventilado y con buena circulación de aire. También se puede utilizar un ventilador o un deshumidificador para reducir la humedad del ambiente.
Es importante tener en cuenta que el tiempo de secado puede variar dependiendo del tamaño y grosor de la pieza de arcilla. Las piezas más grandes y gruesas tardarán más en secarse que las piezas más pequeñas y delgadas.
Además, es importante tener en cuenta que el tiempo de secado también puede depender del tipo de arcilla utilizada. Algunas arcillas pueden secarse más rápido que otras debido a su composición química.
1. Protege tus piezas de arcilla secada al aire del agua: Aunque la arcilla secada al aire es resistente, no es totalmente impermeable al agua. Por lo tanto, es importante proteger tus piezas de la humedad y evitar que se mojen. Puedes aplicar una capa de sellador o barniz resistente al agua para proteger la superficie de la arcilla y hacerla más resistente a la humedad. Esto ayudará a preservar tus creaciones y evitará que se dañen cuando entren en contacto con el agua.
2. Evita exponer tus piezas de arcilla secada al aire al agua directamente: Aunque hayas aplicado un sellador o barniz resistente al agua, es recomendable evitar exponer tus piezas a largos períodos de inmersión en agua o a una exposición prolongada a la humedad. Esto puede debilitar la estructura de la arcilla y hacer que se deteriore con el tiempo. Si necesitas limpiar tus piezas, utiliza un paño húmedo en lugar de sumergirlas en agua. Además, asegúrate de secarlas completamente después de limpiarlas para evitar la acumulación de humedad en la superficie.